Conversando con
el amigo Miguel, LU6ETJ me comentaba que lograba
excelentes resultados con las bobinas de aire, cosa
que resultó cierta en el diseño de
los equipos de transmisión y recepción
telegráficos publicados anteriormente. El
desafío ahora era conseguir una forma y un
tipo de alambre que pudiera conseguir todo el mundo.
Comenzamos con las jeringas hipodérmicas
de Guille, LW4DZC y alambre de 0,70mm2, pero nos
comentaron de Puerto Rico que no los podían
hacer porque se necesitaba una orden médica
para comprar jeringas. Tuve también muchos
pedidos de cambio de alambre porque era difícil
adquirirlo.
Aprovechando el último encuentro
del Grupo Argentino de Telegrafía, donde
nos juntamos amigos de todo el país, les
comenté mi idea de utilizar caño de
PVC de 5/8” para instalaciones eléctricas
y cable de instalación telefónica
para interiores (ver figura 1) y coincidimos que
se consigue en todo el país. Con este dato
me puse a trabajar en una tabla (ver figura 2) que
tuviera (sobre un caño de PVC de 5/8) la
cantidad de espiras necesaria para lograr distintas
inductancias y las frecuencias de resonancia a diversas
capacidades: 15pF, 100pF, 365pF y 410pF, elegidas
por coincidir con la mayoría de los capacitores
variables de recepción, cosa que veremos
con detalle en un próximo artículo
cuando armemos un preselector de recepción.
El Q de las mismas resultó estar entre 80
y 90.
Si queremos averiguar la frecuencia
de resonancia para una bobina o un capacitor dados
tenemos las siguientes fórmulas, con f en
MHz, L en µHy y C en pF:
L= 25.330 / f_ C
C= 25.330 / f_ L
Para los que trabajan con frecuencias más
elevadas hice otra tabla (ver figura 3) con una
bobina de alambre esmaltado de 1mm2, que se puede
conseguir en cualquier taller de bobi- nado de motores
y se enrolla sobre una broca o mecha de 10mm, retirándola
luego y quedando la bobina al aire y con las espiras
juntas, detalle importantísimo, ya que si
estiramos las espiras varía la inductancia.
El Q que presenta varía entre 40 y 60. |